Si se descuidan, pueden desencadenar problemas graves. Un número cada vez mayor de investigaciones científicas centra el interés en el papel de los dientes y las encías en la salud general, a fin de influir en la calidad de vida y la expectativa misma de nuestra existencia. En particular, se ha demostrado que existe una correlación estadísticamente significativa entre el número de dientes perdidos por enfermedades gingivales o por caries y la aparición de defectos de las funciones cognitivas, pero también de defectos cardiovasculares, fuerza muscular y capacidades auditivas y visuales. . El mismo estudio incluso identificó un índice de mortalidad más alto en aquellos que conservan menos de 20 dientes. Pero no solo: también podría estar involucrado el corazón. Además, la periodontitis podría influir en el desarrollo de la artritis reumatoide y la diabetes e incluso problemas durante el embarazo.
¿Qué es la periodontitis?
Se trata de una enfermedad inflamatoria crónica, la sexta más importante del cuerpo humano, desencadenada por las bacterias presentes en la placa bacteriana oral y en el sarro, que golpea las encías y está caracterizada por daños irreversibles a las estructuras de soporte (periodontal) de los dientes. Alrededor del 50% de la población adulta está afectada.
Encías y corazón
La enfermedad periodontal puede exponernos a riesgos cardiovasculares. Aunque si todavía no se conocen con certeza los mecanismos de las patologías gingivales que afectan al corazón y al sistema vascular, se sospecha que las bacterias provenientes de las infecciones gingivales, que entran en el circuito vascular, pueden colonizar las placas de colesterol presentes en las arterias, en particular a nivel coronario, agravando así el cuadro arteriosclerótico y la condición cardíaca. La inflamación crónica típica de la enfermedad periodontal también puede desempeñar un papel en la formación y agravación de condiciones sistémicas comprometidas. El tratamiento de la periodontitis por parte del dentista determina un beneficio no solo dental, causando una reducción de los lípidos oxidados y la actividad de las células inflamatorias a nivel sistémico, sino que, de hecho, determina una reducción en el riesgo de aparición de enfermedades cardiovasculares en las personas. que la padecen.
También puede causar artritis reumatoide.
Estudios recientes destacan el potencial de la enfermedad periodontal para influir y probablemente provocar otra patología importante: la artritis reumatoide, que afecta a la membrana sinovial de las articulaciones. Esta membrana reacciona a la inflamación crónica aumentando su volumen e invadiendo el cartílago y el hueso circundantes, causando su destrucción gradual. Este proceso podría afectar no solo a las articulaciones, sino también a los ojos, los pulmones, el corazón y los riñones. Es precisamente por esta razón que se define como una enfermedad sistémica. Uno de los principales problemas de la enfermedad es la reacción autoinmune que determina la producción por parte del organismo de anticuerpos contra los componentes presentes en las membranas sinoviales. Algunas bacterias involucradas en el inicio de la periodontitis (en particular Porphyromonas gingivalis) son capaces de estimular la producción de estos autoanticuerpos, lo que determina una estrecha correlación entre las dos patologías.
Complicaciones obstétricas
Las enfermedades periodontales se asocian con un mayor riesgo de nacimiento de niños prematuros y / o con bajo peso. Hoy, de hecho, sabemos que algunos procesos inflamatorios agudos de la madre, también ubicados lejos del tracto genitourinario, pueden desempeñar un papel no secundario en la aparición de alteraciones patológicas del embarazo desde un punto de vista etiopatogenético. En particular, la correlación entre periodontitis y eventos negativos asociados con el embarazo está basada en dos hipótesis experimentales. La primera se basa en la posibilidad de que las mujeres con periodontitis estén sujetas a bacteriemia frecuente. Las bacterias activan una cascada de procesos inflamatorios en la placenta y el feto, con riesgo de parto prematuro y / o nacimiento de niños con bajo peso. La segunda hipótesis se basa en el hecho de que la periodontitis puede causar un aumento de las citoquinas, sustancias con actividad proinflamatoria que causan alteraciones en la placenta y el feto. Entre estas, son relevantes el aumento reducido en el peso corporal del feto y el desarrollo de contracciones uterinas prematuras, con riesgo de parto prematuro.
Periodontitis y diabetes
Los pacientes con diabetes deben observar con especial cuidado la prevención primaria de la enfermedad de las encías, que consiste en una higiene bucal escrupulosa en el hogar y frecuentes visitas periódicas (4-6 meses) al dentista para verificar el estado de la salud del tejido y proceder, cuando sea necesario, a las maniobras de higiene oral profesional. Mantener una higiene oral escrupulosa no solo es necesario para controlar y contrarrestar el posible inicio de la enfermedad periodontal, que puede conducir a la pérdida de los dientes, sino también porque se ha demostrado científicamente que la correlación entre el estado gingival y la diabetes (niveles glucémicos) es bilateral Por lo tanto, un buen control higiénico y la salud de las encías contribuyen a mejorar la salud general del paciente diabético.
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